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Tadó: sintiendo la emergencia
30 Mar 2021
Tadó: sintiendo la emergencia

Tadó: sintiendo la emergencia
30 Mar 2021
Tadó: sintiendo la emergencia

Eutimio, la incertidumbre:

Tenía 25 años cuando ocurrió. Oímos los gritos de los vecinos y supimos que los combates habían llegado al resguardo. En el 2013 las FARC y el gobierno combatían. Había gente de visita en mi casa en ese momento, así que todas las personas se reunieron en la habitación principal. No teníamos nada para defendernos, solo unos palos contra esas armas. Cuando todo volvió a quedar en silencio huimos de nuestras casas. En el 2016 otro grupo armado llegó a la vereda el 17 de agosto. Los perros comenzaron a ladrar. Empezaron a llamar a la gente para que saliera. Como no contestamos, entraron a la casa. Todo el mundo empujó la puerta para intentar mantenerla cerrada, pero la derribaron. A las 5:00 p.m. nos obligaron a salir a todos. Nos reunieron a los hombres, a las mujeres y a los niños. Nadie intentó huir, sabíamos que nos dispararían. Después de amenazarnos y apuntarnos con sus armas se fueron. Huimos por la selva, por los arbustos, atravesamos el río.

Corrimos hasta el resguardo vecino, ellos nos recibieron. Nos escondimos toda la noche en las casas de palo. Teníamos miedo de volver a nuestras casas. Cuando regresamos se habían llevado todo.Tiraron lo poco que teníamos el suelo y se llevaron animales. Nos dolió. El 14 de noviembre del año pasado la tormenta se llevó nuestras casas. Cada cuatro años vivimos una tragedia. Perdimos muchas cosas, los tejados de nuestras casas, comida, cultivos; pero fue triste perder animales.

Eutimio, “empezar tres veces en la vida es difícil”

Más de 32.000 personas afectadas. Los medios titularon: “Por la crueldad de las lluvias, los municipios más afectados son: Tadó, Medio Atrato, Lloró, Istmina, Bagadó, Medio San Juan, Condoto, Nóvita, Atrato y Carmen de Atrato. Es crítica la situación de los municipios de Carmen de Atrato, Lloró y Bagadó. El Chocó se encuentra incomunicado en la vía que conduce hacia Antioquia por múltiples derrumbes”. Los reportes de actores humanitarios describían la imposibilidad de conocer la situación de la población: “debido a la afectación de vías, no se hemos podido llegar hasta el municipio y recopilar la información de sus necesidades.. La segunda temporada de lluvias a lo largo del territorio nacional tuvo su pico de intensidad el fin de semana del jueves 11 de noviembre de 2020. Según el Instituto de Estudios Ambientales, producto de la confluencia del fenómeno de variabilidad climática de La Niña y del paso del huracán Iota por el Mar Caribe, se presentó un aumento drástico en los niveles de precipitación de la habitual temporada de lluvias que se registra cada año para esta época. De acuerdo con los reportes de la comunidad internacional, se reportaron más de 50 emergencias en población vulnerable y expuesta a amenazas y fenómenos naturales siendo las inundaciones, los deslizamientos de tierra, movimientos en masa y temporales (vendavales con fuertes lluvias), los que más se registraron. Se reportaron crecientes súbitas, avalanchas, corrientes de arroyos, tormentas eléctricas y caída de árboles, debido al incremento sustancial en el nivel de precipitaciones, desbordamiento de ríos en el Chocó. Las afectaciones incluyen destrucción parcial y total de infraestructura vivienda, hospitalaria, vial, de servicios públicos domiciliarios rurales y veredales, productiva, turística y pérdida de cultivos y cosechas. La emergencia acorraló a habitantes como Rosmiña quién perdió sus animales, bienes y enseres, se quedó sin luz, agua y comida. La Alerta ROJA por probabilidad de desbordamiento del rio llegó a Tadó.

Más de 32.000 personas afectadas. Los medios titularon: “Por la crueldad de las lluvias, los municipios más afectados son: Tadó, Medio Atrato, Lloró, Istmina, Bagadó, Medio San Juan, Condoto, Nóvita, Atrato y Carmen de Atrato. Es crítica la situación de los municipios de Carmen de Atrato, Lloró y Bagadó. El Chocó se encuentra incomunicado en la vía que conduce hacia Antioquia por múltiples derrumbes”. Los reportes de actores humanitarios describían la imposibilidad de conocer la situación de la población: “debido a la afectación de vías, no se hemos podido llegar hasta el municipio y recopilar la información de sus necesidades.. La segunda temporada de lluvias a lo largo del territorio nacional tuvo su pico de intensidad el fin de semana del jueves 11 de noviembre de 2020. Según el Instituto de Estudios Ambientales, producto de la confluencia del fenómeno de variabilidad climática de La Niña y del paso del huracán Iota por el Mar Caribe, se presentó un aumento drástico en los niveles de precipitación de la habitual temporada de lluvias que se registra cada año para esta época. De acuerdo con los reportes de la comunidad internacional, se reportaron más de 50 emergencias en población vulnerable y expuesta a amenazas y fenómenos naturales siendo las inundaciones, los deslizamientos de tierra, movimientos en masa y temporales (vendavales con fuertes lluvias), los que más se registraron. Se reportaron crecientes súbitas, avalanchas, corrientes de arroyos, tormentas eléctricas y caída de árboles, debido al incremento sustancial en el nivel de precipitaciones, desbordamiento de ríos en el Chocó. Las afectaciones incluyen destrucción parcial y total de infraestructura vivienda, hospitalaria, vial, de servicios públicos domiciliarios rurales y veredales, productiva, turística y pérdida de cultivos y cosechas. La emergencia acorraló a habitantes como Rosmiña quién perdió sus animales, bienes y enseres, se quedó sin luz, agua y comida. La Alerta ROJA por probabilidad de desbordamiento del rio llegó a Tadó.

Rosmiña, la tenacidad:

 

Me sentía debajo del bajo el agua. Llegué hace 20 años al municipio de Tadó. Me enamoré cuando era una estudiante en el 2001. Tenía 16 años y mi esposo me trajo al resguardo indígena. Ahora tengo 5 hijos, 3 niñas y 2 niños.

 

La mayor tiene 15 años y la menor tiene un año. Ese día el río se creció, hacía 3 días no paraba de llover. No teníamos hacia donde correr. El rio nos atrapó. El único camino de salida del resguardo se inundó y quedamos incomunicados. Nadie sabía de nosotros, no teníamos comunicación. Vimos cómo el río arrastró las casas de vecinos. Pero cuando el agua quería llevarse nuestra casa dejó de llover. La perdida de nuestros animales fue triste para toda la comunidad.

Hernan Guaitoto, la ilusión:

 

Puedo ver que caminaron cuatro horas por el barro con los alimentos que necesitamos y con los cuadernos que nuestras hijas deseaban para seguir estudiando. Ustedes y las autoridades de Tadó fueron las únicas personas que llegaron a esta comunidad luego de la inundación.

 

Han sido unos días difíciles. Si solamente fuera la lluvia. Aquí la guerra y la pandemia también nos han querido fregar. Pero no señora, acá no nos dejamos. Trabajamos juntos. Nos apoyamos. Acá la presencia del gobierno es bien escasa, pero hacemos lo que podemos para sobrevivir. Mi obligación como líder es darle esperanza a mi comunidad para salir adelante. Aunque yo sé que la verdadera esperanza llegó con sus alimentos, con el trabajo que hicieron con los profesores, con su enseñanza para lavarnos las manos y prevenir la pandemia y con la información que nos dieron para exigir nuestros derechos. Los derechos, eso es lo que a mi me ilusiona.

Gracias a la ayuda de la Embajada de Suiza en Colombia – Ayuda Humanitaria y Desarrollo (COSUDE) en Colombia, más de 3.300 personas recibieron ayuda humanitaria durante los primeros 90 días de la emergencia.
 
El Consejo Noruego para refugiados brindó atención mediante servicios para acceso a derechos esenciales, información y asistencia legal en acceso a derechos en el marco de la ley de víctimas. En poblaciones vulnerables y con necesidades agudas entregamos ayudas con transferencia monetarias. Brindamos atención y acompañamiento a niños, niñas y adolescentes, docentes y agentes educativos en el marco de educación en emergencias. Formamos en prácticas de higiene y entornos saludables, además, entregamos kits de higiene adecuados a las necesidades de las comunidades.

 

Derechos Respetados y Personas Protegidas