Dramáticos testimonios se presentan en la cumbre de Londres El canciller británico, William Hague, y la actriz Angelina Jolie presentaron un protocolo que plantea que ese tipo de violencia sexual sea declarado como delito internacional. Según la ONU, 36 mujeres y niñas son violadas a diario en la República Democrática del Congo (RDC). Ellas son parte de las más de 200 mil mujeres que han sido atacadas sexualmente durante los últimos 16 años. Se suman entre 250 mil y 500 mil mujeres violadas en el genocidio de Ruanda de 1994, más de 60 mil en el conflicto de Sierra Leona y al menos 20 mil en la guerra de Bosnia en los años noventa. Combatir esta barbarie es uno de los objetivos de la primera Cumbre Global contra la Violencia Sexual en Zonas de Conflicto, que se realiza en Londres con delegados de Gobiernos, ONG y sectores sociales de al menos 140 países. En ese marco, ayer, el canciller británico, William Hague, y la actriz Angelina Jolie presentaron un protocolo internacional que dispone que se investigue ese tipo de violencia sexual. El político Hague y la estrella de Hollywood inauguraron el martes la cumbre, que busca definir acciones concretas para combatir ese problema a través de la investigación y la documentación de los casos y el procesamiento de los responsables, además de ayudar a las víctimas. La cumbre es el corolario de una campaña de dos años de Jolie y Hague, que han visitado RCD y Bosnia para cumplir con las víctimas de violación. El citado protocolo plantea que la violencia sexual sea declarada delito internacional. En su comparecencia de ayer, Jolie, enviada especial del Alto Comisionado de la ONU para los Refugiados (Acnur), contó que, tras haberse reunido con supervivientes de violaciones en zonas de guerra, el mensaje común de todos ellos era uno: justicia. La actriz recalcó que la violación en cualquier circunstancia es un crimen contra la humanidad y denunció que a millones de personas se les niegan los derechos de ser aceptadas por la sociedad, apoyadas y ver que sus agresores rindan cuentas a la justicia. Lamentó que las condenas sean muy bajas y subrayó que, por ello, otro objetivo de la cumbre es poner fin a la impunidad. “Los agresores tienen que saber que, incluso durante el conflicto, se recogen evidencias y que serán usadas contra ellos”. Jolie también abogó para que, en la cita de Londres, se resuelva que en los países sumidos en conflictos armados, los violadores sepan que los acuerdos de paz no incluyen amnistía para ellos. “Todos sabemos lo difícil que es lograr condenas por violación incluso en países con democracias estables, así que debemos trabajar más para hacer que la justicia sea posible en países frágiles”. Hague recibirá a su par nigeriano y a representantes de Camerún, Chad, Níger y Benín para analizar el drama de las casi 300 niñas secuestradas por la secta islamista Boko Haram. Adicionalmente, Hague, Jolie y el secretario de Estado de EEUU, John Kerry, anunciarán las resoluciones de la cumbre. En tanto, desde ayer, víctimas de esas atrocidades cuentan su historia en Londres. En la nota adjunta, el testimonio de una de ellas, la periodista colombiana Jineth Bedoya, víctima de los paramilitares. Hoy es subdirectora de diario El Tiempo. (Efe y AFP)
Jineth Bedoya
El drama de una periodista colombiana Tiene 30 años y es subeditora del diario El Tiempo de Bogotá. Es una de las miles de mujeres que han sobrevivido a la violencia sexual en medio de conflictos armados. Ella fue a la cumbre de Londres para compartir su historia. Fue capturada y torturada por paramilitares en 2000, en el ejercicio de su profesión mientras cubría el conflicto armado. Arropada por varias premios Nobel, mañana presentará en Londres la campaña “Unidas por la acción”, con la que busca concienciar a los Gobiernos sobre esa lacra y promover medidas de prevención y contra la impunidad. Según Bedoya, en América Latina y en otras zonas del mundo, el arraigado machismo hace que, muchas veces, los casos de violencia sexual a mujeres pasen desapercibidos y que las víctimas sean tratadas incluso como culpables. Otro problema, dice Bedoya, es que hay leyes buenas que no se aplican. “Hay jueces y fiscales que, cuando una mujer denuncia una violación, lo primero que dicen es: ella se lo buscó. (…) Lo vemos constantemente en los médicos, en los policías, en los jueces. Eso nos ha llevado a tener casos que quedan en la impunidad en Colombia -en donde se calcula que hubo hasta 2 millones de mujeres violadas durante el conflicto-“. El mensaje de quienes sobreviven a las violaciones es uno: justicia’. Angelina Jolie, actriz y enviada especial del Acnur 300 niñas y adolescentes nigerianas han sido secuestradas desde abril. Este caso será analizado hoy en el marco de la cumbre en Londres. El machismo hace que, muchas veces, las víctimas sean tratadas incluso como culpables’. Jineth Bedoya, periodista