La asistencia humanitaria basada en transferencias de efectivo permite a las personas en crisis comprar los alimentos, productos y servicios locales que necesitan.
En 2015, el seis por ciento de toda la ayuda humanitaria se basó en transferencias en efectivo, según el informe Doing cash differently del Overseas Development Institute. Eso es un aumento considerable frente al menos del uno por ciento en 2004. En 2016, las transferencias en efectivo representaron el 10 por ciento de la cartera total del programa de NRC.
Personas refugiadas y migrantes reciben asistencia de bonos y efectivos por NRC. Foto: Nadège Mazars / NRC
Cómo se ve el efectivo como asistencia humanitaria:
El efectivo viene con diferentes tipos de condiciones y restricciones:
Es sencillo. La asistencia en efectivo nos permite ser más rápidos, más eficientes y más transparentes. Obtienen asistencia directamente las personas desplazadas a las que servimos, quienes pueden gastarlo como mejor les parezca.
Hay otra razón: puede impulsar las economías locales. Cuando se proporciona dinero en efectivo en forma de ayuda, puede crear una demanda de bienes y servicios. Esto, a su vez, puede desempeñar un papel en la reconstrucción o el desarrollo de la infraestructura y los mercados locales.
En Líbano, por ejemplo, un estudio de 2014 mostró cómo el efectivo tenía efectos multiplicadores significativos en la economía local: cada dólar gastado por quienes recibían la asistencia en efectivo generaba USD 2,13 del producto interno bruto para la economía libanesa.
El efectivo da la libertad de elección. Con la asistencia en especie tradicional, como jabón, mantas, arroz, las personas desplazadas a menudo venden estos artículos, por debajo del precio de mercado, para obtener algo que necesitan más. El efectivo les permite conservar el valor total del apoyo que reciben y priorizar según sus necesidades.
La mayoría de los proyectos en efectivo de NRC proporcionan efectivo incondicional y sin restricciones. Utilizamos tecnologías digitales, como teléfonos móviles y tarjetas electrónicas, para realizar las transferencias.
Pero en algunos lugares, esto simplemente no es posible. La tecnología no está allí, o la persona desplazada que recibe ayuda no tiene una identificación formal, lo que significa que legalmente no pueden tener una cuenta bancaria o comprar un teléfono inteligente. En estos casos, damos bonos. Como último recurso, distribuimos efectivo directamente. Pero debido a los riesgos, esto es extremadamente raro.
En resumen: no. El efectivo no siempre es la mejor solución en una crisis humanitaria.
A veces, los mercados locales son demasiado débiles y no funcionan lo suficientemente bien como para manejar la demanda que podría generar el efectivo. En estos casos, el efectivo podría conducir a la inflación.
Otras veces, no existe una forma segura de transferir la asistencia y realizar transferencias en efectivo podría poner en riesgo al personal o a los destinatarios.
A menudo, las personas desplazadas enfrentan problemas que el efectivo no resuelve. Cuando un desastre como un ciclón causa una devastación total, el efectivo no puede hacer mucho. Pero la ayuda tradicional, como tiendas de campaña y mantas, puede ser vital.
Finalmente, el efectivo no necesariamente puede reemplazar otros servicios cruciales que brindan las organizaciones humanitarias: servicios de protección, asistencia médica y saneamiento.
Con esto en mente, NRC analiza cada situación y determina qué paquete combinado de ayuda tendrá el mayor impacto.
El Roster de Fortalecimiento de Capacidades de Efectivo y Mercados (CashCap) despliega expertos senior en programación de efectivo y mercados para facilitar y fortalecer la capacidad del sector humanitario para llevar a cabo y promover transferencias de efectivo en una crisis o emergencia. Las agencias de la ONU, las misiones integradas, las autoridades nacionales y las redes de ONG pueden solicitar apoyo de CashCap y los expertos en efectivo serán desplegados con poco tiempo de anticipación. Los despliegues son financiados por ECHO y, por lo tanto, constituyen un apoyo gratuito para las agencias. Lee más.
En Afganistán, utilizamos un sistema híbrido de subvenciones condicionales en efectivo y apoyo en especie para ayudar a construir y reparar refugios. Esto permite a las familias construir sus casas de acuerdo a las necesidades de sus propios hogares.
Realizamos ferias en la República Democrática del Congo, donde los refugiados pueden usar cupones de efectivo incondicionales distribuidos por NRC para comprar bienes que de otro modo no podrían comprar. Para Deborah, de 23 años, esto es un salvavidas.
En 2015, los refugiados canjearon más del 99,5 % de todos los bonos por diversos artículos para el hogar, lo que de muchas maneras demostró ser más útil para las necesidades de las familias individuales.
En la emergencia de 2015, entregamos dinero en efectivo sin condiciones a 30.000 yemeníes para que pudieran comprar alimentos.
Saleh Ozloq compró cinco colmenas de abejas con una subvención en efectivo de NRC. En solo seis meses, esas cinco colonias se cuadruplicaron.
Todos nuestros servicios son gratuitos y se implementan sin intermediarios. Bajo ninguna circunstancia el Consejo Noruego para Refugiados (NRC) solicita recursos económicos o favores a cambio de la prestación de sus servicios.
¿Tienes una retroalimentación o reclamo?
Escríbenos en:
Colombia, Ecuador y Panamá:
Venezuela:
Norte de Centroamérica y México:
Se encuentra habilitado para la recepción de notificaciones judiciales y comunicaciones interinstitucionales.