“Cientos de miles de personas refugiadas kurdas huyeron para buscar refugio en Irak, pero el mundo no pudo responder. Fue extremadamente frustrante”, dice Jan Egeland.
El Secretario General del Consejo Noruego para Refugiados (NRC) recuerda bien la grave crisis humanitaria en la frontera entre Irak y Turquía. Era 1991, y él era el Secretario de Estado en el Ministerio de Asuntos Exteriores de Noruega.
Abrumados por la gran cantidad de personas necesitadas y sin los recursos para ayudar, la Agencia de la ONU para los Refugiados, ACNUR, se dirigió a Noruega en busca de ayuda.
Para apoyar la respuesta humanitaria, Egeland y el Alto Comisionado para los Refugiados, Sergio Vieira de Mello, acordaron establecer una capacidad de respuesta de emergencia de personal dispuesto a apoyar a las Naciones Unidas en emergencias.
Dentro de una semana, el primer personal de NORCAP subió al avión hacia Kurdistán.
“Tengo que admitir que había caos alrededor del primer grupo de despliegues a Kurdistán”, dice Egeland.
Uno de ellos fue Rolf Moi, un agrónomo noruego y antiguo misionero.
“Las condiciones en las que muchas personas desplazadas vivían eran horribles. Algunas vivían en cuevas, tiendas de campaña o ruinas. Hacía un frío extremo, y la gente estaba agradecida por la ayuda que les brindamos, por limitada que fuera”, dice.
Han pasado 25 años desde esa primera misión y NORCAP se ha convertido en uno de los principales proveedores globales de experiencia en el mundo. Hoy en día, brindamos experiencia para apoyar los sectores humanitario, de paz y desarrollo, para proteger vidas, derechos y medios de sustento de las poblaciones afectadas.
Los conflictos e inseguridades, cada vez más combinados con el cambio climático, desastres y fragilidad del Estado han creado crisis complejas con consecuencias humanitarias graves. A lo largo de los años, NORCAP ha ampliado su experiencia para poder brindar el apoyo más necesario, estratégico y eficiente a sus socios.
“NORCAP ha sido un excelente socio a lo largo de los años, no solo por la cantidad de personal que logran desplegar, sino también por nuestra relación y lo fácil que es trabajar juntos. Su flexibilidad, agilidad y capacidad de respuesta significan que siempre ha sido muy eficiente y un gran placer cooperar con ellos”, dice Julien Temple, un antiguo empleado a largo plazo de UNICEF.
“A lo largo de los años he tenido el placer de conocer a muchos de los expertos de NORCAP en el campo y he visto que son profesionales, trabajadores, creativos, orientados al servicio y flexibles. Tienen una buena reputación en el sistema de la ONU. Me siento orgulloso de llamarme el padrino de NORCAP”, dice Jan Egeland.
Todos nuestros servicios son gratuitos y se implementan sin intermediarios. Bajo ninguna circunstancia el Consejo Noruego para Refugiados (NRC) solicita recursos económicos o favores a cambio de la prestación de sus servicios.
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