El Consejo Noruego para Refugiados (NRC por sus siglas en inglés) es una organización humanitaria independiente que ayuda a las personas que se ven obligadas a huir. Protegemos a las personas desplazadas y las apoyamos mientras construyen un nuevo futuro.

Protegemos a las personas desplazadas y las apoyamos mientras construyen un nuevo futuro. Comenzamos nuestra labor de ayuda tras la Segunda Mundial. Hoy, trabajamos en crisis nuevas y prolongadas en más de 40 países.

NORCAP trabaja para proteger y empoderar mejor a las personas afectadas por crisis y el cambio climático. Colaboramos con socios en la búsqueda de soluciones para satisfacer la necesidades de las personas en el riesgo.

Recibe las últimas noticias de nuestro trabajo en terreno, entrevistas, opiniones y campañas.

El anhelo de la población de Altos de la Florida: su integración comunitaria

Publicado 2 Nov 2021
Publicado 2 Nov 2021

Ahora la comunidad de Altos de la Florida, Soacha en el centro de Colombia cuenta con tres nuevos espacios para reforzar sus lazos comunitarios.

Con el sonido de la marimba, el saxofón, las tamboras y el movimiento de las faldas al ritmo de la cumbia, los niños, niñas y adultos celebraron la construcción y adecuación de un comedor, una huerta y la Asociación Codo a Codo.

“Hoy, estamos muy felices, más allá de la importancia de las obras queremos agradecer el apoyo por fortalecer nuestro tejido social porque hicieron que las personas de la comunidad se conocieran los unos con los otros y trabajaran mancomunadamente”, expresó Ana de 59 años.

El reloj marcó las diez de la mañana. La inauguración estaba por empezar y las niñas, niños, jóvenes y adultos mayores se reunieron con la felicidad intacta por recibir los resultados de su trabajo comunitario.

Altos de la Florida, es un barrio ubicado en una de las montañas del municipio de Soacha, donde conviven cientos de personas provenientes de Venezuela, colombianas y afectadas por el conflicto armado que buscan reconstruir su vida desde cero en medio de calles de tierra, sin servicio de acueducto y en casas de madera y plástico.

Como NRC, llegamos hace seis meses y junto a las personas de la comunidad identificamos que existían retos de integración. Así que juntos construimos un plan de trabajo comunitario y la comunidad eligió los espacios donde podría reunirse, compartir y fortalecer sus lazos.


Nos alimentamos

La inauguración se hizo por ‘estaciones’, pequeños espacios que les permitirían a las personas conocer las nuevas mejoras al que la comunidad le puso nombre.

La primera estación fue el comedor comunitario “Hormipaz”, donde más de 350 niñas, niños, adultos mayores y mujeres de escasos recursos reciben almuerzo.

“Este espacio se mejoró porque estábamos cocinando en malas condiciones, las estufas estaban deterioradas, no teníamos dónde picar los alimentos ni tampoco cajones dónde guardarlos. Gracias a las remodelaciones ahora vamos a brindar un mejor servicio, si esto no se hubiera hecho, seguramente hubiéramos cerrado”, dijo Mary Luz, una de las mujeres que lidera el comedor.

Al ingresar a este espacio, las personas descubrieron un lugar renovado con nuevas estufas, implementos de cocina, estantería, congeladores, baterías sanitarias renovadas y hasta el mural que unos meses atrás plasmaron con pintura y pinceles simbolizando la importancia de la alimentación.


Sembrar semillas de integración

Después de disfrutar del primer espacio, la población entró por grupos a la huerta comunitaria, un pequeño espacio construido y adornado por diferentes plantas y alimentos que ya crecían como la lechuga y la cebolla.

“Ahora tenemos un espacio cubierto dedicado solamente para la huerta, donde podemos sembrar nuestros propios alimentos. Esta huerta es como un nicho de paz, cuando uno entra aquí se siente muy tranquilo y deja afuera todo el estrés y las cosas malas. Gracias a este nuevo espacio promoveremos el cuidado y respeto por nuestra tierra y por nuestras plantas” dijo Ana Méndez de 59 años.

Ana explicó a su comunidad el funcionamiento de la huerta, el sistema de riego que implementan en ella y les entregó algunas pequeñas plantas que habían sembrado y pintado días atrás junto a otras mujeres. Esta planta era un símbolo para que cada una de las personas dejara crecer la planta de la integración y el respeto desde sus hogares.


Un espacio para fortalecer la cultura, el arte y las capacidades

Los imponentes rayos del sol no fueron impedimento para que la población continuara con la jornada de inauguración.

En pequeños grupos caminaron por las calles de su barrio y se dividieron para visitar los diferentes espacios de la Asociación Codo a Codo, un lugar de tres pisos en donde la gente pueden acceder a asistencia y a diferentes actividades culturales dedicadas a fortalecer sus capacidades.

“Con estas acciones hemos visto que podemos construir la paz como comunidad. Las adecuaciones y las capacitaciones que nos han dado como asociación significa para nosotros el poder prestar un servicio con más dignidad, con más respeto a la comunidad y poder abrir otros espacios de trabajo para la población que vive en este territorio” dijo Norma Bernal, fundadora de la Asociación Codo a Codo.

Las personas visitaron este espacio, conocieron su historia y su trabajo de años con adultos mayores, niñas, niños y personas vulnerables que viven en el barrio.

También, disfrutaron de la muestra musical de “Musicalidad”, una escuela de música que permite que niñas, niños, adolescentes y jóvenes desarrollen nuevas aptitudes y tengan un espacio sano de convivencia alejado de los riesgos a los que se enfrentan día a día.

“Gracias a las adecuaciones que hicieron a la asociación, ahora tenemos un espacio solamente para Musicalidad, esto nos permite no solo tener más seguridad de los instrumentos, sino que nos permite que los chicos puedan desarrollar las clases de mejor manera. Este espacio hace que los niños puedan expresarse con libertad”, dijo Marlón Castillo de 24 años, uno de los jóvenes docentes de Musicalidad.

La comunidad disfrutó de las adecuaciones de los salones, baterías sanitarias, pintura, techo y de estantería que promoverá que la Asociación continúe brindando esperanza a la población a través de actividades lúdicas, culturales y de aprendizaje.


Este solo es el comienzo

Al final de la jornada la población de Altos de la Florida disfrutó de muestras culturas, palabras de agradecimiento y reafirmaron que este era solo el comienzo para seguir fortaleciendo sus lazos comunitarios.

 La construcción y adecuación de estos espacios solo fueron la muestra de que la población puede reunirse, compartir y disfrutar como una sola comunidad sin importar sus diferencias.

En Colombia gracias al apoyo del Gobierno de los Estados Unidos y su oficina Bureau of Population, Refugees, and Migration, promovemos la integración entre quienes salieron de su país y los habitantes de las comunidades que les acogen.

Foto: Alejandro Camelo/NRC