En una acción conjunta para garantizar el acceso digital a la educación, varias organizaciones que forman parte del Grupo del Sector de Educación en Emergencias/Clúster de Educación en el Ecuador, se han unido para hacer un llamado a las empresas de telecomunicaciones y operadoras que prestan los servicios de telefonía, internet y televisión para solicitar su apoyo.
Concretamente, el llamado se centra en tres puntos que, si se materializan, marcarían la diferencia en el acceso digital de la comunidad educativa. La primera solicitud tiene que ver con facilitar el acceso y descarga gratuita de los contenidos educativos alojados en el portal del Plan Educativo COVID-19 a todos los usuarios prepago y pospago registrados en cada una de las operadoras.
En segundo lugar, el Grupo solicita la creación de paquetes gratuitos de datos y llamadas a docentes y estudiantes en condiciones de vulnerabilidad, para facilitar el seguimiento del proceso educativo y de su situación psicoemocional. Finalmente, pide a las operadoras gestionar la donación de equipos tecnológicos (smartphones o tabletas) nuevos o usados como instrumentos de educación para estudiantes de los sectores rurales del país.
Este llamado se realiza en el marco de la pandemia provocada por el COVID-19 y en un contexto en el que los niñas, niños y adolescentes han resultado particularmente afectados. A pesar de los esfuerzos desplegados para que el proceso educativo no se frene o se realice de forma discontinua, esta crisis afecta de manera especial a las familias de escasos recursos económico que no cuentan con las facilidades tecnológicas y de conexión.
Esta brecha de conectividad (solo el 37% de los estudiantes tiene acceso a internet1) se convierte en un factor adicional que podría incrementar el abandono escolar, haciendo cada vez más amplias las inequidades en el acceso oportuno a la educación, y disminuyendo las posibilidades de romper con el círculo intergeneracional de la pobreza.
Según el Grupo del Sector de Educación en Emergencia, Ecuador como país tiene un reto enorme por delante: ayudar a nuestros niños, niñas y adolescentes para que su desarrollo no se detenga y puedan superar este momento, haciendo posible que la educación continúe.
Quienes lo integran son el Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Refugiados – ACNUR, la Agencia Adventista de Desarrollo y Recursos Asistenciales Ecuador RSS – ADRA Ecuador, AVSI, CARE Ecuador, ChildFund. CISP, Consejo Noruego para refugiados. CONTRATO SOCIAL por la EDUCACIÓN, CORAPE, Diners Club, Defensoría del Pueblo – Ecuador, Desarrollo y Autogestión DYA, FUDELA, Fundación Tierra Nueva, Grupo Faro, HIAS, IPANC, Misión Scalabriniana, Nación de Paz, Oficina la UNESCO en Quito y Representación para Bolivia, Colombia, Ecuador y Venezuela, Organización Internacional para las Migraciones, Organización de Estados Iberoamericanos para la Educación, la Ciencia y la Cultura – OEI, Plan Internacional, Red Latinoamericana de Organizaciones NO Gubernamentales de Personas con Discapacidad y sus Familias (RIADIS), RET, Servicio Jesuita a Refugiados Ecuador, Unicef, VVOB y World Vision Ecuador.