El Consejo Noruego para Refugiados (NRC por sus siglas en inglés) es una organización humanitaria independiente que ayuda a las personas que se ven obligadas a huir. Protegemos a las personas desplazadas y las apoyamos mientras construyen un nuevo futuro.
Protegemos a las personas desplazadas y las apoyamos mientras construyen un nuevo futuro. Comenzamos nuestra labor de ayuda tras la Segunda Mundial. Hoy, trabajamos en crisis nuevas y prolongadas en más de 40 países.
NRC trabaja para proteger los derechos de las personas desplazadas y vulnerables durante la crisis. Nos especializamos en seis áreas: seguridad alimentaria, educación, vivienda, asistencia legal, gestión de campamentos y agua, saneamiento e higiene.
NORCAP trabaja para proteger y empoderar mejor a las personas afectadas por crisis y el cambio climático. Colaboramos con socios en la búsqueda de soluciones para satisfacer la necesidades de las personas en el riesgo.
El impacto de la violencia sobre la comunidad LGBTI Centroamérica
Publicado 11. Nov 2019
Las personas lesbianas, gay, bisexuales, trans e intersex (LGBTI) se encuentran comúnmente expuestas a situaciones de discriminación, violación de sus derechos humanos y persecución alrededor del mundo como consecuencia de su orientación sexual o de género. Esta situación es particularmente grave en países como Honduras, El Salvador y Guatemala en Centroamérica donde las personas LGBTI experimentan una mayor vulnerabilidad en áreas afectadas por la violencia generalizada.
A pesar de que la homosexualidad es criminalizada, los Estados se han mostrado reacios a diseñar e implementar medidas que brinden garantías de protección, asistencia y acceso a la justicia para la población LGBTI lo que se traduce en exclusión, discriminación e impunidad.
En el norte de centroamérica existe una falta de registros oficiales de homicidios o crímenes cometidos contra personas LGBTI, debido a su orientación sexual o identidad de género.
De manera general, en el norte de Centroamérica se habla de una violencia estructural, donde la discriminación hacia las personas LGBTI afecta su acceso a derechos fundamentales tales como la educación, la salud, la justicia y el trabajo aumentando su vulnerabilidad.
En muchos casos, la violencia comienza desde temprana edad en el entorno familiar y comunitario y se agrava a medida que se involucra al crimen organizado, padillas, maras y al estado.
Para muchas personas LGBTI, el único mecanismo de auto-protección es el desplazamiento dentro o fuera de las fronteras de su país. Muchas solicitan refugio en otros países, especialmente en Estados Unidos o México. El 88% de los solicitantes de asilo LGBTI reportaron haber sufrido violencia sexual y de género en su país de origen.
Para visibilizar la situación de violencia y desplazamiento en la región, el Consejo Noruego para Refugiados (NRC) ha liderado la serie de publicaciones “Panorama de violencia y protección en el Norte de Centroamérica” y hace su sexta entrega: El impacto de la violencia sobre sobre la población LGBTI.
¿Cuáles son los principales riesgos que enfrentan las personas LGBTI en particular en el contexto de violencia generalizada? ¿Cuáles son las acciones prioritarias que los Estados y las organizaciones humanitarias deberían poner en marcha frente a las necesidades?
